Thomas A. Cajahuanca Trauco

Querido acólito o acólita :
Quisiera que observaras este video con respecto al llamado que a hecho Dios en tu vida. no ha mirado tu condición de pecado sino la disposición ha servir. eres la niña de los ojos de Dios, la parte más importante de él. por eso sirvelo con mucha devoción y entusiasmo.
Thomas C.
Los acólitos son muy imprensidibles en la Iglesia, pues de ellos se obtienen las futuras vocaciones que estarán al servicio de la comunidad.
El ministerio del acólito es reconocido por la colación o institución por parte del obispo, aunque este ministerio en la práctica sólo se realiza por acólitos "extraoficiales", es decir, no instituidos. Normalmente se instituye como acólito a los candidatos a las sagradas órdenes del diaconado y del presbiterado, aunque el ministerio no es todavía clerical (la condición de clerigo se recibe con la ordenación de diácono). Según el código de derecho sólo podrán ser instituidos diáconos "varones laicos" aunque el ejercicio de ese ministerio no les da derecho a remuneración por parte de la Iglesia católica.
Aunque el término acólito se usa también para referirse a quienes ayudan en el altar sin haber sido instituidos, es mejor usar para ello la expresión "monaguillo" o "servidor del altar".
Es habitual que el ministerio del altar sea ejercido por niños, llamados en este caso monaguillos, con la única diferencia de que éstos no pueden dar la comunión, por su edad. El hecho de que sea lo habitual no significa que sea un ministerio para niños, sino pueden ejercerlo sin institución cualquier cristiano que ha recibo la primera comunión. La institución del ministerio es sólo para varones que completaran la iniciación católica.
La palabra monaguillo proviene de monjes pequeños, en Italia son conocidos como chierichetti o pequeños clérigos, en catalán escolans y en Alemania ministrantes. Se prefiere la palabra acólito, reservando el vocablo "monaguillo" para los ministros extraordinarios o de hecho, es decir que no han sido nombrados solemnemente y no pertenecen a un "colegio" de acólitos y/o que ejercen estas funciones de forma esporádica.
Los monaguillos son “acólitos de hecho”, que sin haber sido instituidos en el ministerio de acólitos, lo ejercen más o menos establemente en las celebraciones comunitarias.
Las funciones que estos monaguillos pueden desempeñar son:

3. Prestar su servicio en las diversas procesiones, por ejemplo con la cruz, los cirios, el incienso o el Misal.
4. Atender en el ofertorio a la recogida de los dones.
Esta clase de servicio de ayuda al sacerdote, encomendados a niños y adolescentes, son un poco como la imagen representativa de una comunidad cristiana que esta formada también por niños y jóvenes. Su presencia y su ayuda en la celebración, es el espacio del presbiterio, es buena imagen de la comunidad y motivo de gozo para todo.
Deben tener siempre en cuenta los monaguillos que su papel dentro de la comunidad es de servicio y no es de un derecho. A la vez es importante considerar que las funciones que realizan dentro de las celebraciones deben ser realizadas con espíritu humilde, y de acuerdo con el sacerdote que preside.
En el siguiente video veremos un testimonio de un sacerdote con respecto a la importancia que tienen los acólitos dentro del misterio de la Iglesia.

1) Considerar UN GRAN HONOR el hecho de ser acólito. Esforzarse por honrar este cargo y ser fiel a esta gracia.
2) HACER BIEN CADA MOVIMIENTO y con EXACTITUD. Por ejemplo: preparar el altar, ayudar la Misa, encender el turíbulo, las entradas y salidas de las ceremonias. Dar lo mejor de sí.
5) CONOCERSE Y CORREGIRSE UNO MISMO. Tenemos defectos y debilidades. Aceptar las correcciones con humildad. Pedir la Gracia de Dios.
6) SERIEDAD Y RESPONSABILIDAD en el cumplimiento del deber. Tomar con seriedad las órdenes, los avisos, las ceremonias, los deberes propios del acólito.
7) NO MIRAR hacia los fieles o para cualquier parte durante las ceremonias.
8) PERMANECER ERGUIDO en posición recta:
ARRODILLADO: erguido, las manos juntas sin cruzar ni mover los pies.
DE PIE: los pies derechos, las manos juntas.
SENTADO: el cuerpo erguido, las rodillas juntas, las manos sobre las piernas.
CAMINANDO: despacio. Los ojos bajos. No caminar hacia atrás.
9) REALIZAR CADA ACCIÓN SOLAMENTE DESPUÉS DE HABER TERMINADO LA ANTERIOR Sentarse, arrodillarse y ponerse de pie (no apoyarse cuando se está de pie).
10) ATENCIÓN en las ceremonias. Hacer las cosas bien y DESPACIO, pero con prontitud y desenvoltura. ENSAYAR Aprender bien.
11) SIMETRÍA Y SINCRONIZACIÓN en las ceremonias. Realizar las acciones junto a otros al mismo tiempo; por ejemplo, las inclinaciones y las respuestas de la Misa. Guardar siempre la misma distancia con relación al otro acólito.
12) SILENCIO: en la Iglesia, en la sacristía. No hablar en la Iglesia, no reírse, no hacerse gestos.
13) RESPETO Y OBEDIENCIA a los sacerdotes, superiores, ceremoniarios más antiguos.
14) BUEN EJEMPLO: en el catecismo, en la escuela, en la calle, en la Iglesia. Observar un comportamiento ejemplar (que motive a ser imitado). Hacer las cosas con dedicación, piedad y celo.
Quisiera querido acólito o acólita que te tomes la molestia de poder leer el mensaje que nuestro santo padre el papa Benedicto XVI da a los niños que sirven en el altar como tu lo haces:
Desde esta perspectiva podemos entender el tema de vuestra peregrinación: "Spiritus vivificat".
El Espíritu, el Espíritu Santo, es quien vivifica. Es él quien vivifica vuestra relación con Jesús, de modo que no sea sólo exterior: "sabemos que existió y que está presente en el Sacramento", pero la transforma en una relación íntima, profunda, de amistad realmente personal, capaz de dar sentido a la vida de cada uno de vosotros. Y puesto que lo conocéis, y lo conocéis en la amistad, podréis dar testimonio de él y llevarlo a las demás personas.
Espero que este mensaje te pueda servir para motivar tu servicio que tienes detro de nuestra Iglesia Católica.
El recibirse como acólitico es un acto muy solemne, ya que cualquier persona no puede ayudar al sacerdote en el altar...te cuerdas la vez que te recibiste como acólito...o cuando acólitates por primera vez...como te sentiste al elegir ser acólito...observa este video y reflexiona...
Ayúdame a estar muy atentopara reconocerte en seguida en la persona del sacerdote,a escuchar con provecho tu Palabra,a alimentarme dignamente con tu Cuerpo y tu Sangre,y a reconocerte presente en medio de la asamblea de los hermanos.
Ayúdame a servir a tu altar como tú mereces,a hacerlo todo con diligencia y eficacia,y, sobre todo, a hacerlo por tu amor.
Sí, que todo mi actuar sea, Señor,expresión del amor con el que quiero amarte,puesto que sólo en ti encuentro la paz y la alegría.
Ayúdame, Madre de Dios y madre mía,tú que nos dijiste a todos: "Haced lo que él os diga". Amén.
Oración para después de la Misa
Señor,bendito seas por el gran don de la Eucaristía.Una vez más me has querido cerca de tu altar,sirviéndote a ti y a los hermanos.
Gracias por tu Palabra, que me enseñatodo lo que has hecho y haces constantemente por mí;gracias por el sacerdote, imagen tuya,que eres el buen Pastor de todo el rebaño;gracias por la comunidad de los hermanos,que me ayudan a comprender que soy miembro de la Iglesia;que una vez más nos has dado por amor.
Ayúdame, ahora,al volver a mi casa y a mis obligaciones de cada día,a ser buen cristiano.Que sepa reconocer en cada persona a mi hermano,que espera ser amado de todo corazón.Así no me apartaré nunca de tu lado,aquí en la iglesia y también fuera de ella.
Madre de Dios y madre mía,intercede para que en todo lo que diga, haga o piense,tu Hijo y Señor nuestro sea glorificado.
Amén
Espero que las cosas escritas en esta pagina te hagan reflexionar sobre lo importante que eres para Dios y la Iglesia por el servicio que realizas.
Hazlo con mucho entusiamos y devoción.
!!!!QUÉ DIOS TE BENDIGA!!!!